"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Opinión
ABRAXAS
Carta abierta a la Ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad
Por Arturo San Román Ferreiro
02/12/2016
Bienvenida Sra. Ministra. Llega usted a un mundo apasionante, el de la Sanidad, los Servicios Sociales e la Igualdad. Empezaré por decirla que la envidio, y la envidio porque tiene usted en su mano la posibilidad de cambiar la sociedad. Que mejor legado puede dejar un político que haber contribuido a una mayor "igualdad" entre los ciudadanos.
A Borja Fanjul, porque tiene claro a quién representa
Usted es abogada de formación y esto es una ventaja, no tanto por el conocimiento de las leyes, sino por el sentido de justicia que se presupone a quien ha elegido la abogacía como eje central de su vida.
Y es que el mundo social está repleto de injusticias, y el mundo social al final son los ciudadanos, ciudadanos que, recordemos, son iguales ante la Ley, pero no ante la Justicia Social.
En el fondo, su responsabilidad como ministra es la Justicia Social: articular leyes, impulsar medidas, apoyar proyectos y, además, escuchar mucho a todos los sectores poblacionales distintos. Este debe ser su día a día.
A mí me gustaría que no se quede mucho en su despacho, que salga a la calle, que viva el día a día de una gran parte de la sociedad que necesita y reclama Justicia Social. Solo desde el conocimiento real de las personas y sus problemas se consigue la empatía necesaria para actuar porque si no, al fina,l el despacho se convierte en una torre de marfil que solo posibilita el conocimiento institucional, un conocimiento posiblemente necesario, pero insuficiente.
Por cierto, aprovechando que usted está especializada en Derecho Urbanístico e Inmobiliario debería impulsar el cambio de la Ley de Propiedad Horizontal y propiciar la igualdad para miles de personas con discapacidad que no pueden ejercer un derecho tan básico como salir de casa.
Y como conocedora de las leyes y Ministra de Igualdad acometer la reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General. Ya conoce usted que en este país nuestro hay 100.000 personas con discapacidad que no pueden ejercer su legítimo derecho al voto.
Esto solo son solamente dos puntos de los muchos que afectan a la igualdad efectiva de las personas con discapacidad.
Y reitero que la envidio por su capacidad y su oportunidad, desde su cargo, para mejorar políticas efectivas que terminen con la violencia de género y el acoso escolar, mitiguen la pobreza energética y aporten soluciones para que las miles de personas en riesgo de exclusión puedan tener la ocasión de salir de ella, así como evitar que muchas otras puedan ser excluidas en el futuro.
Me atrevo a pedirla valentía para no tener que ser políticamente correcta y sí apasionada, incluso activista en la construcción de una sociedad más justa e igualitaria, y que se ponga, sin ambages, al frente de la defensa de los derechos humanos de todos aquellos grupos poblacionales que sufren, de una manera u otra, la desigualdad.
Antes de que me olvide, recordarle que siguen sin desarrollarse las leyes del Tercer Sector de Acción Social y del Voluntariado, aprobadas en octubre de 2015, leyes muy hermosas, pero que, sin su desarrollo, se quedan solo en papel mojado.
Sra. Ministra me atrevo a recordarle que usted no está sola. Hoy usted tiene el apoyo de miles de organizaciones y millones de personas que trabajan cada día en revertir y mitigar situaciones de injusticia social. Si usted se gane su confianza, liderará la transformación social.
No quiero extenderme más en esta primera carta. Solo me resta desearle lo mejor y que, más allá de sus responsabilidades políticas, disfrute trabajando codo con codo con los interlocutores de lo social para hacer realidad el nombre de su ministerio.
Arturo San Román Ferreiro, experto en Comunicación Social
arturosanromanf@
